Cada domingo de cualquier tarde, cosa así como a las veinte horas, se produce un crimen en Canal Sur. Os preguntaréis, ¿un crimen?. No, un crimen no, un delito, una INJUSTICIA, una matanza, una gamberrada. Señores, cuesta creer que haya personas que cobren por quitarle la vida a animales, como son los toros. Los toreros, já, me reiría en la cara del primero que viese. En mi opinión, no tiene ningún mérito salir a una plaza a quitar la vida a un animal, pero ningún merito. Es más, no puedo convivir con personas taurinas. Esa gente, que disfruta con el sufrimiento del animal, con la colocación de las banderillas, y con los grandes derrames de sangre… ¡venga hombre! Esa gente tiene el corazón de piedra, no se puede disfrutar viendo la muerte de un ser vivo. No sé donde encontráis el arte ni la belleza de la profesión. Y lo que más coraje me da, es que mientras todo esto ocurre, la justicia callando y manipulando. A todos estos asesinos,
¡Debería daros vergüenza!
Les invito a pensar igual que yo
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