NO NO NO

Siéntome como un verdadero fracasado que paró momentáneamente el corazón a este rincón. La verdad es que me entiendo plenamente. Llevo unos días de cojones. Desde luego que los maestros éstos no nos entienden, o no nos quieren entender. Menos mal que me quedan once días lectivos. Y parecen pocos, pero no lo son. Me quedan 11 días de sufrimiento intenso. Mañana mismo entrego cuatro trabajos. Desde luego que tiene lo suyo la cosa. Mírenme, aquí como un gilipollas a las dos de la mañana acabando mis cosas, porque claro, no las he podido hacer antes. Y va en serio, no he tenido tiempo. Hace semanas notaba que los profesores apretaban, pero ahora ahogan. Y si a toda esta mezcla de agobio, tonterías y saboríos, le añadimos el cuento este de los recortes, el resultado es igual a una mierda pa mí. Que les den a todos los que me han fastidiado. Y lo peor, es que tendré un veranito cargado de química. Desde luego, que apuntarse uno a estas cosas sin que nadie le obligue, tiene faena. Pero no es ese el caso. Quedan 11 días y los tengo que aprovechar al máximo. Tengo y tienen que aprovecharlo, todos los que os la jugáis. Tengo el blog abandonado. Me da corage, pero aguantarme es lo único que puedo hacer. Desde luego que al blog no es al único que tengo abandonado. Sólo puedo ver a mis amigos los fines de semana, y cuando puedo porque estamos libres. Que asco, joder. Podrían pasar los once día más rapidito, joder ya. ¿Saben una cosa? Que me voy. Mañana me espera un día fuerte de contenidos. Abrimos la mañana con matemáticas y química, y no están las cosas para hacer el tonto. Volveré siendo libre. Hasta entonces.