La aventura comenzará de nuevo, sígueme en:

http://cristiangomezacosta.blogspot.com.es/

Como único redactor del espacio en el que se encuentra comunico que en los dias venideros comenzaré una nueva aventura a la que os invito a que os unáis en: http://cristiangomezacosta.blogspot.com.es/

Contacto: cristian_betico_09@hotmail.com | Text is available under the Creative Myself Production; additional terms may apply. By using this site, you agree to the Terms of Use and Privacy Politic. Cristian Gómez ® is a registered trademark of the Blogger Fundation, a non-profit organization.

7/7/2014

domingo, 12 de febrero de 2012

A tres raquetas sobre el cielo.

Una de las cosas que he logrado en los diecisiete años de de vida que van, ha sido conseguir a los amigos que siempre he querido tener. La verdad es que, si lanzamos una mirada al pasado, puedo apreciar que mi vida ha dado un giro vertiginoso. Recuerdo especialmente momentos en los que pasaba prácticamente todo el tiempo que podía con mis horcajeros (horcajeros: amigos que viven a no más de cien metros de mi casa). Hablábamos el otro día de los cuatro gatos que éramos. Éramos cuatro, y aunque la unión hacía la fuerza, no encontrábamos ver el grupo que desde siempre habíamos deseado tener.

Pasaría mucho tiempo, hasta que el grupo es lo que es. Las cifras se han disparatado. Alcancemos las veinte personas, sin exagerar. No es la cantidad, es el contenido que cada uno de ellos lleva, el carácter que los define. No podría seguir sin ello. Me he acostumbrado a una vida con ellos, y no puedo vivir si no los tengo. Los necesito para todo. Es muy grande la emoción. Pienso cada día en que la vida me ha regalado mucha suerte. La felicidad no permanente es una de las metas que siempre me he planteado llevar al día, y me llena de orgullo y satisfacción saber que ahora no me toca a mí encargarme de ser feliz, porque son los no veinte, porque aunque somos muchos, no somos todos, pero sí la mayoría los que se encargan de que pase el mejor momento de mi vida cada vez que estemos juntos. Y eso, no lo llena nadie. Querer se quiere de distintos modos. Mis padres y mi hermano son lo mejor que tengo; pero no me llenan de tal manera. Jamás pensé que tendría un tesoro cómo éste. Gracias a la vida, por sonreírme de tal modo, y gracias a todos vosotros, por hacer que cada día me levante con la fuerza de que hay que seguir mirando hacia delante, porque esa es la base de una felicidad no permanente, pero sí verdadera.