Cae el telón.

Me he hartado del Recordando. Siempre igual. El mismo diseño, el mismo escritor, la misma gente, y las mismas entradas. Recordando. ¿Recordando qué? Los recuerdos, sólo son recuerdos. Recordando. Y no quiero recordar. La vida se vive día a día, decía un amigo. Quizás como decía, no sea bueno mirar al pasado, aunque nunca estuve muy de acuerdo con él. Uno en la vida se da cuenta de sus progresos mirando al pasado. Yo he cambiado bastante y he definido una personalidad alta que hace unos años no tenía. Todo esto recordando, mirando al pasado. En fin, que me voy. He decidido iniciar una nueva etapa que no sean solo recuerdos. Hoy clausuro el recordando, y dejo plantada la semilla de un nuevo espacio que aparecerá con el objetivo de que no sean recuerdos, de que sean algo así como posibilidades. En fin, fue un placer conoceros a todos y que siguiesen mis entradas y artículos, pero los recuerdos se fueron, al menos desaparecieron por aquí. Nos seguiremos leyendo, os avisaré de dónde nos vemos. HOY POR FIN, DESPUÉS DE CUATRO AÑOS DE FIDELIDAD A ESTE BLOG Y A LOS QUE LO HAN APOYADO, PUEDO DECIR QUE EL RECORDANDO TIENE LOS DÍAS CONTADOS. FELIZ VERANO

Chimpón.

Y Selectividó. Selectividad, Selectividad, y Selectividó. Para no perder la costumbre del pueblo. En fin, no tengo ganas de escribir, sólo pasaba por aquí para decir que he acabado los estudios de Segundo de Bachillerato. Ea, el más contento. Arza que bien el niño. Y que me largo a celebrarlo. Que os vaya bien, gentuza. Ya os cuento.

Que Selectividad.

Y Selectividad. Y todo es Selectividad. Me levanto, salgo a correr un poco porque es lo único que me pueda gustar que voy a hacer en la mañana, llego, me ducho, y Selectividad. Selectividad mientras desayuno, y mientras descanso. Selectividad en el Cola Cao, en el jamón de la tostá. Selectividad hasta en el plato de garbanzos. Qué asco, siempre he odiado los garbanzos. Son asquerosos, pero bueno, no tan asquerosos como la Selectividad. Y encima tengo una amiga que se llama Celeste, y cuando me llama, pone: ´´Llamando Cele´´. Selectividad, que me dejes, cabrona. Qué jartura, tío, no tengo ni ganas de escribir yo mismo. Me he cargado los temacos de Historia de España. Estaban locos los tíos éstos, de verdad, ésto pasa ahora y nos meamos de la risa. Inglés, los 24 temas de Biología (no sé si habré contado alguna vez que mi profesora de Biología está loca y un poco amargada, pero la pobre es que lleva una vida de vieja solitaria, y es totalmente entendible), y Lengua. Que lengua es una gran mierda, quince temas de literatura, y sólo entra uno. Que éstos de la ponencia son muy cabrones todos. Que yo no quiero un texto periodístico, de verdad, que ese es para fracasados, que yo quiero uno literario, pero un poema que yo entienda, no el de la negra de la rosa blanca de Juan Ramón Jiménez que ha caído en Madrid, o uno de Valencia que está escrito en castellano antiguo. A mí me ponen uno en castellano antiguo, me levanto, entrego el examen y me voy. Pero bueno, qué poco queda. Y mientras tanto, día 14: Selectividad. Día 15: Selectividad. Día 16: Selectividad. Día 17: Selectividad, y ya, día 18, empieza lo bueno, examen de Lengua, Historia e Inglés, 19 de Matemáticas y Química (que cómo me voy a reír con el inventario que voy a hacer en ambos exámenes), y el jueves, Biología. Pero mientras tanto, Selectividad. Hasta entonces.

Chimpón.

Enhorabuena, su solicitud para la Prueba de Acceso a la Universidad se ha tramitado correctamente. Y a partir de ahí, todo lo que ha llegado ha sido bueno. Hoy por fin he acabado el curso que decían que era el peor de mi vida. Y lo afirmo. Ha sido un curso asqueroso, lo he pasado fatal, le he hecho un lío al estómago con ésto de saltarme comidas por el agobio, le he dado palizas al cuerpo cuando sólo he dormido dos horas en una noche, o cuando para no dormir y no entretenerme, me he bebido cafés con diez, a veces doce cucharadas de café. Jo, recuerdo esto y me pongo a temblar. ¡Qué mal lo he pasado! ¡Cuántas noches llorando por el puto agobio hasta las seis de la mañana! ¡Y cuantos enfados y discusiones con la familia y con los amigos por culpa de la presión del curso! Pero al fin, se acabó, me despido de este jodido curso para siempre, hasta siempre, capullo, bastante hemos tenido ya juntos, como para seguir con las tonterías. Hasta siempre, tengo una gran nota de media, conmigo no pudiste. Y que nada, que lo tengo claro, pasemos todos juntos por el sendero de la Selectividad, y.. que nos vemos celebrando ésto el 20 de Junio. Suerte hasta entonces. Nos vemos.

Un sí a los transgénicos.

El debate sobre el sí a los alimentos transgénicos o el no a los organismos transgénicos es una cuestión moral que en cada individuo produce una serie de conmociones. A continuación, presentaré mi defensa hacia los organismos transgénicos. Los alimentos transgénicos se cultivan hoy en día en prácticamente todo el mundo, hecho que bajo mi punto de vista es muy favorable para los países que se encuentran en vía de desarrollo. Por esta razón, sin ir más lejos, en África, donde abundan las tierras secas y poco áridas, y donde las condiciones ambientales no son favorables para que se lleven a cabo cultivos tradicionales, la incorporación de los transgénicos llevaría al aumento de la producción, de manera que los alimentos transgénicos producidos serían imprescindibles para acabar con el hambre instalada en este país. La principal ventaja de estos alimentos, entonces, es que aunque se instalen en suelos pobres y secos, la cosecha está más que asegurada debido a las manipulaciones que se han hecho en estos alimentos. Otro motivo por lo que doy un sí a los transgénicos es por la incorporación que éstos tienen de vitaminas. Así pues, se crean alimentos que poseen un elevado número de diversas vitaminas que ayudan a combatir enfermedades y superar malos hábitos alimenticios. Podríamos transportar esta característica a África también, y así llevar millones de vitaminas a un país en el que los ciudadanos lo están pasando tan mal, y donde el alimento escasea cada día más. Y además de las vitaminas, se puede conseguir que se mantengan durante más tiempo las propiedades nutricionales de estos alimentos, y que sean más resistentes a las condiciones ambientales. Y como antes decía, además de que se pueden dar en zonas poco áridas, también ayudan al suelo en el que se han cultivado, debido a que los organismos genéticamente modificados prescinden de un elevado uso de pesticidas y de productos pesticidas que contribuyen negativamente al medio ambiente. En un plano más inferior, se podría destacar que los alimentos transgénicos son más agradables para la vista del consumidor, que por lo general, tiende a optar por alimentos que mejor pinta tienen. Es fácil, ¿prefiere un tomate pequeño y con un tono verde, o un tomate grande, rojo, y hermoso? Esto es ya una cuestión que depende del gusto del consumidor, aunque generalizo, y bajo mi opinión, optamos a los trangénicos cuando nos dan a elegir, aunque no siempre seamos conscientes de que estamos eligiendo el transgénico. Así pues, los alimentos genéticamente modificados poseen, bajo mi punto de vista, una serie de características que conllevan todas ellas a un interés económico, pues todas están relacionadas entre ellas. Entonces, es fácil imaginar que si usamos los transgénicos, la cosecha es mayor, se reducen los pecticidas usados, y por lo general, suelen ser más baratos que los alimentos cultivados tradicionalmente, hechos que llevan a una interés económico notable, y que hace que cada día sean más las cosechas transgénicas las que se cultivan.

Hagan llegar esto a los ojos de doña Carmen García, profesora de Lengua Castellana y Literatura del IES Joaquín Romero Murube de Los Palacios.

Amiga mía Carmen, no sabes lo que me acuerdo de ti cada vez que me va bien en los estudios y cada vez que sumo un triunfo a mi boletín de notas. Y no te imaginas cuánto me he acordado de ti esta mañana. Al fin Carmen, al fin lo he conseguido, he aprobado Química yo solito, al fin he conseguido no suspender esa materia en un trimestre. Y no te imaginas lo contenta que está mi madre también, en casa hasta ella se ha acordado de ti, decía: ´´anda, a ver si tienes tiempo y vas y le haces una visita a Carmen García que verás que contenta se va a poner al verte´´, y la verdad es que la pobre tiene mucha razón. Pero tiempo es lo que nos falta. Es muy duro Carmen, lo estoy pasando fatal este curso, los profesores no paran de cargarnos la agenda, y es durísimo. Pero estaba pensando en que quedan ya sólo dos meses para la Selectividad, y adiós muy buenas al curso. Y qué ganas tengo, ni te puedes imaginar. Estaba pensando en ir a haceros una visita pronto, pero es que no paramos. Y cuando tengo el rato libre yo, estáis reunidos vosotros, y cuándo tenéis un día de estos de fiesta allí que tanto me gustaban a mí, aquí nos están poniendo exámenes para que no faltemos. El día de Andalucía, por ejemplo. Teníamos prevista una visita el día 27 y yo te quería dar la sorpresa hasta que nos pusieron un examen. Pero yo confío en mí, y sé que un día podré escaparme un ratillo, y pasar por allí, que os echo a muchos de menos, que echo de menos vuestras clases y saber qué tal de vosotros, y que me contéis que tal os va, y veros, que hace mucho que no os veo, y de veras, me encantaría saber que tal estáis. Y lo dicho, que te deseo que te vaya genial, que sigas siendo la que yo conocí y verás como vas calando hondo en tus conejillos de India, que seas feliz junto a los tuyos, y que te quiero un montón. Un beso, Carmen.

Dieciocho otra vez.

El motor lleva la vertiginosa velocidad de mil novecientos noventa y cinco revoluciones por minuto, y lleva recorrido un camino de dieciocho millas. Dieciocho millas que han pasado a velocidad de vértigo, que se han ido, así, cuál estrella fugaz. Andaba pensando en estos momentos en la fugacidad de la vida. Me siento afortunado. Puedo decir muy orgulloso que he vivido dieciocho años de los más conmovedores, felices, entrañables, familiares y amistosos que he podido vivir en toda mi vida. Y la verdad es que un gran fundamento, siendo quizás el más importante, ha sido la aparición de los Raqueteros, hace tan tanto tiempo. Porque sabéis que fundamento mi vida en la amistad, que la amistad le da mano a mi vida, y lo que supone para mí una vida sin vosotros, y que no puedo seguir sin esos momentazos que nos hemos cargado juntos, y sin esos momentos de plena amistad, en la que tanto amor nos hemos demostrado. Son momentos que me hacen sentir grande, querido, especial, único, imprescindible, y raquetero. Y puedo decir que no hay cosa de lo que más orgulloso me sienta. Sé que muchos estaréis pensando que vuestros amigos son los mejores. Pero no, los míos son especiales, los míos son únicos y diferentes, son auténticos a su manera, son un mundo por conocer,y una familia con la que vivir. Porque como familia los siento, como familia los vivo, y como familia quiero viviros de aquí, hasta que la máquina baje sus revoluciones a cero. Os quiero, raquetas. Ya sabéis sin necesidad de recordar qué sería de mi vida sin vosotros. Gracias de todo corazón por todo este tiempo. ♥

Feliz año

No se me ocurre otra forma de empezar que felicitaros a todos el año que hace unos días nació, y desearos a todos que se os llene de felicidad, que el trabajo no os falte, abunde la salud, y en estos tiempos tan difíciles, y tan complicados, el año os regale una vida digna y honrada, un plato de comida cada día, una cama en la que dormir calentito, y una casa en la que vivir. A estas alturas de la vida, es lo necesario para cada persona. Dicho queda, feliz año. Y la verdad, es que yo mismo me sorprendo. Es duro, porque no quiero dejar un blog al que yo mismo me até hace ya casi cuatro años, y del cual me hice responsable, pero a la vez que en la carta no hay mucho donde elegir, el camarero no para de servir tapas. Suerte hasta la próxima vez que nos veamos.